miércoles, 23 de mayo de 2012

Seguiremos soñando

Todos sabemos qué pasó aproximadamente el pasado domingo en Laguna. De poco sirve lamentarse y agachar la cabeza cuando aún queda mucha tela que cortar. Muchas lenguas hablarán de la ocasión que se dejó pasar, pero ya pasó la hora de lamentarse.

El vestuario ha hablado y ha decidido que el futuro es para los valientes, que el pasado ha de enterrarse a muchos metros para que nadie vuelva oír hablar de él. Y llega el momento de la conjura. No se harán queimadas, ni concentraciones, no queremos charlas eternas en el evstuario, ni soflamas, ni argumentos. Nos vale con creer en nuestras posibilidades. 

El año pasado conseguimos subir a Primera División con tesón, gallardía y orgullo, disfrutando sobre el terreno de juego y, lo más importante, fuera de él. Porque esto es el Saso. Entrenamos dos días a la semana, los viernes los disfrutamos por nuestra cuenta, no tenemos entrenadores de renombre porque nos basta con tener personas y no un animal con silbato. Y cuando tenemos tiempo libre nos juntamos para divertirnos como amigos y como equipo.

El que se apunta a este equipo pensando en ganar sea como sea está muy equivocado. A veces se hacen las cosas mejor, a veces hay cosas que se podrían mejorar, no lo sé. Ni me preocupa, porque sé que todos y cada uno de mis compañeros que se cambian en mi vestuario, que se ríen de mis bromas, que se asombran con la cabeza de Mikel, que se ponen la zancadilla, que se tiran caucho, que recortan en las vueltas al campo, que escatiman los abdominales, que huyen de las flexiones, que se escabullen de llevar los conos, sé que todos ellos piensan lo mismo que yo.

Buena parte de este equipo lleva aquí desde que no levantaba cinco palmos del suelo, y seguirá estando hasta que le sea posible, porque cuando uno entra en el Saso es muy difícil salir. Cada año vienen dos o tres y se va alguien, pero el bloque es el mismo, y la ideosincrasia, también. Pasarlo bien todos juntos dando patadas a un balón y al compañero más cercano cuando nadie mira.

Este año ha habido lesiones, el Aficionado ha minado nuestros recursos, los horarios no nos han sido favorables, y junto al hecho de que aquí nadie es un futbolista extraordinario, ahora estamos en una situación muy delicada.

Nos queda un último partido en el que tenemos que ganar. Quizá sea suficiente, quizá no lo sea y el descenso se cebe con nosotros. No me preocupa, porque esto es más que mirar cada semana una clasificación. Es saber que estamos todos juntos, como una familia, preparados para afrontar este reto con toda nuestra intensidad y corazón.

Hay quien lleva cuatro meses aquí y ya evidencia ese sentimiento. Edgar y Víctor se niegan a creer que estamos en Segunda y son capaces de alzarle la voz a una institución como Josele, pero en ningún caso son ellos los que van a ganar este partido. Somos nosotros, los imbéciles que aparecemos en el apartado de ''Plantilla''. Esos amigos que llevamos tanto tiempo jugando juntos, que sabemos al milímetro lo que va a hacer el de al lado con el cuero en los pies.

Este año ha sido un buen año. Lo hemos pasado muy bien. Hemos disfrutado en los momentos buenos, hemos apretado los dientes cuando la cosa iba mal. Por eso hay que ganar este partido contra el Pegaso. No por mantenernos en Primera o evitar la Segunda, ni por ver más alto nuestro nombre en la clasificación, sino por la felicidad de saber que hemos cumplido un objetivo.

Que cuando todo iba mal nos hemos levantado, sabemos que hay compañeros que se van a dejar la piel para mantener la categoría. Y si no se consigue, nadie se va a morir por ello. Hemos disfrutado, hemos competido, hemos jugado. Y por eso hay que ganar, insisto, no por alardear de ello en caso de permanencia, sino por ver la felicidad en los ojos de esta panda de zánganos que tenemos por compañeros de vestuario y amigos fuera de él.

El C.D.José Luis Saso no es un club, es un grupo, una asociación de amigos que son felices jugando, y aún más felices cuando están cerca del compañero pasándolo bien. Por eso vamos a ganar el domingo a las 17.00, no por nuestros padres, ni los amigos de la grada, ni por los entrenadores, ni por Josele, ni por Luis Saso, ni por Borja, ni por los del bar. Vamos a ganar por nosotros.

Somos uno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario